Escaneando Negativos - Del analógico al digital

Hoy en día, prácticamente todas las fotografías que tomamos son en formato digital, pero seguro que en lo cajones de casa tenemos aún guardadas muchas fotos que hicimos con película y, muchas de ellas que nos gustaría archivar digitalmente, enviar a los amigos o simplemente hacer copias.

La opción "fácil" (aunque no siempre la mejor) sería escanear directamente la copia en papel y crear un archivo digital. Elegir esta opción tiene el problema de que si las copias en papel tienen mucho tiempo o no han sido guardadas en óptimas condiciones, probablemente hayan ido perdiendo color, tengan marcas, manchas, etc. No obstante, si la copia en papel está bien conservada y el revelado que en su día se hizo nos convence, escanear la copia en papel es una opción válida y, como decía al principio, más sencilla.

El segundo método, que es el que explicaremos, sería escanear el negativo o, en su caso, la diapositiva. Para escanear un negativo o una diapositiva el proceso viene siendo el mismo, lo que varía es el postprocesado, ya que en el caso del negativo, tras el escaneado deberemos positivarlo.

Las ventajas de escanear el negativo/diapositiva son varias, entre otras:
1. Suelen conservarse mejor ya que no suelen ser manipulados y, por tanto, no se ensucian ni estropean tanto.
2. En el caso del negativo, nos permite volver a positivar la fotografía, de manera que si la copia en papel que en su día se hizo no nos gusta, tenemos una segunda oportunidad para mejorarla.
3. En muchas ocasiones cuando mandamos a revelar un carrete, las copias en papel (dependiendo del formato en que revelemos) cortan los bordes de la imagen. Ahora podremos escanear toda la imagen que se plasmó en la película.

Escaneando el negativo o diapositiva

PASO 1: Sencillo pero efectivo. Limpiar bien tanto el negativo como el escáner (cristal y si fuese necesario la lámpara superior que ilumina el negativo).

PASO 2: Colocar el negativo en el escáner. Ten cuidado y fíjate que colocas la película mirando hacia abajo (las inscripciones de los bordes de la película deben quedar hacia abajo) salvo que tu escáner tenga un alimentador automático que les dé vuelta al entrar en el escáner.


PASO 3: Ajustar el programa de escaneado. Probablemente el programa de tu escáner te permita elegir si vamos a escanear un "Reflectante" (que es lo habitual) o "Película". Elegiremos película. Ahora probablemente nos mostrará un diálogo de "Tipo de Película" donde nos dará varias opciones: Negativo en color, Negativo blanco y negro y Positivo.



Las opciones de "negativo" sirven para escanear el negativo y que el propio escáner "positivice" la imagen, dándonos ya la imagen final. La de "Positivo" serviría para escanear las diapositivas o, para escanear los negativos y después positivarlos en Photoshop o similar.

Para un control total del proceso, deberíamos elegir siempre "Positivo" y después tratar la imagen en Photoshop a nuestro gusto. No obstante, podemos primero dejar que el software del escáner haga todo el trabajo y ver si es de nuestro agrado, lo que nos ahorraría mucho tiempo (y el tutorial ya terminaría aquí ...).

Otros ajustes: Resolución: El máximo que permita el escáner (real no interpolada)
Profundidad de color: También la máxima 24 o 48 bits.

(siempre debemos escanear en máxima calidad ya que para reducir siempre habrá tiempo y a más calidad de escaneo más facilidad de trabajo en la postproducción)

No hacer correcciones de la imagen directamente en el programa de escaneado, dejar esto para Photoshop.

PASO 4: Escaneamos el negativo. Al seleccionar la sección que vamos a guardar es útil dejar un poco de la "separación entre fotos" del negativo ya que la usaremos de muestra cuando positivemos. Guardamos en formato NO COMPRIMIDO (tiff por ejemplo). No debemos usar formatos comprimidos al escanear ya que perderíamos información.

PASO 5: Nos vamos a Photoshop. Abrimos la imagen y empezamos a trabajar.

Lo primero que haremos será abrir el diálogo de Niveles (Imagen --> Ajustes --> Niveles) y configuramos el "Punto negro de la imagen". Para esto primero iremos a "opciones..." y ajustaremos el "Recorte de Iluminaciones" al 0%, después seleccionamos el cuentagotas de "Configurar Punto Blanco" (sí, sí el de blanco ya que la imagen aun está en negativo y, por tanto su punto negro es el blanco) y pinchamos en el "borde de separación entre fotos" que dejamos al escanear en el paso 3, de modo que todo el borde de la imagen quedará en blanco puro (RGB: 255, 255, 255).

Hecho esto, debemos Invertir la imagen (Imagen --> Ajustes --> Invertir) y obtendremos nuestra imagen en positivo. Si vemos que el color que obtenemos no es muy bueno, podemos volver atrás y seleccionar nuevamente el punto negro de la imagen haciendo click con el cuentagotas en otra zona del borde del negativo, ya que quizás hayamos seleccionado una zona mala.

Ahora lo único que nos queda es hacer los últimos ajustes de color, brillo, curvas, etc. como haríamos con cualquier otra imagen, recortar el borde negro que nos sobra y guardar la imagen si queremos en formato comprimido jpg para ahorrar espacio, aunque yo prefiero guardar siempre una copia en PSD para uso futuro. En cualquier caso, debemos guardar siempre el TIFF que escaneamos sin hacer ninguna modificación sobre él ya que éste será nuestro "negativo digital" que podremos usar tantas veces como queramos.

En mi caso, yo solo aplicaré un "ajuste de color automático" y la imagen queda perfecta.






Ahora a por las vuestras !!